Virus

Miguel es un ingeniero que trabaja en una empresa el ctrica en una peque a ciudad en el norte de Espa a. Viudo, tiene un hijo preadolescente, Marcos. Casado con Ana, una mujer con un pasado de malos tratos, vive una existencia tranquila en una casita con jard n cerca de la capital donde trabaja.La historia transcurre en un trasfondo de una epidemia que se origina en China y que poco a poco se va extendiendo por el mundo. Poco a poco la epidemia va afectando a sus vidas, primero de forma indirecta, para acabar afectando directamente a sus vidas.Novela escrita durante el confinamiento de la pandemia, trata de contar una historia diferente, en la que el lector sentir la empat a de lo que nos ha ocurrido, pero en una novela con un final sorprendente e inesperado.Sobre el autorIngeniero de profesi n, en las ant podas de mi formaci n tengo la pasi n por la escritura. Desde hace m s de 10 a os llevo publicando novelas y peque os relatos en diferentes blogs.He experimentado en diferentes g neros literarios, como la saga de novela negra "Crimen perfecto", novelas de humor como "El ltimo concierto de Sako de Pota", de ciencia ficci n como sta o b licas, como "Pilar". Tambi n el relato infantil como la peque a saga de "Buscando a t o Rodolfo".Despu s de tantos a os, he acabado desarrollando un estilo propio que se repite en toda mi obra, basado en el cap tulo corto de lectura f cil, huyendo de las grandilocuentes descripciones, de los cap tulos de relleno, buscando la complicidad del lector.Algunas de mis novelas han tenido una acogida muy buena, con buenas cr ticas. Si os gustan, no me lo cont is a m solo, cont dselo al mundo dejando alguna rese a en Amazon.Si dese is contactar conmigo, en mi web en permanente construcci n, edicionesazaroa.com puedes preguntarme lo que desees a trav s de un sencillo formulario de contacto.Por ltimo, simplemente deciros que no vivo de la literatura, ni tampoco lo pretendo. Pero que cada vez que veo que alguien est leyendo una novela m a, siento que estoy compartiendo algo con ese lector. Y esa es la raz n por la que escribo.