Tu gracia es suficiente

A diario, empleamos un sinn mero de objetos que nos son tiles para las actividades que desempe amos: cada cosa que nos rodea tiene su creador y muy pocas veces nos detenemos a pensar a qui n se le pudo ocurrir inventar aquello que estamos usando, cu nto tiempo le tom dise arlo y con qu prop sito fue creado. Para la gran mayor a de las personas, esta informaci n resulta irrelevante; es por eso que, muy rara vez, leemos el manual de instrucciones antes de comenzar a usar el objeto que adquirimos. Casi siempre asumimos conocer su funcionamiento, sin darnos cuenta de que quien realmente est al tanto de todos los detalles es aquel que lo construy .Toda creaci n, ya sean obras de arte, cuadros, esculturas, tiene la capacidad de reflejar caracter sticas de su creador; as tambi n lo hace la creaci n de Dios: el mundo y nosotros, los seres humanos. Pablo lo menciona en su carta a los romanos: "Porque desde la creaci n del mundo las cualidades invisibles de Dios, es decir, su eterno poder y su naturaleza divina, se perciben claramente a trav s de lo que l cre " (Romanos 1, 20, NVI). Toda la creaci n, sin excepci n alguna, revela sus cualidades; y el ser humano lo hace con un sentido especial, ya que fue creado a su imagen y semejanza.En Tu gracia es suficiente. Aprendiendo a mirar a trav s de sus ojos, Diana Ram rez Torres nos invita a reflexionar sobre la fe, la experiencia que significa tener a Dios en nuestras vidas y darle el lugar que se merece, permitiendo que su bondad - y los cambios que vienen con ella - nos permee.