Sistemas eléctricos de alta tensión

Los sistemas de alta tensión son esenciales en la transmisión y distribución de energía eléctrica, ya que permiten transportar la electricidad a largas distancias con una pérdida mínima de energía. Las líneas eléctricas, las líneas de transmisión y los transformadores desempeñan un papel en el proceso de transmisión y distribución de energía. Los transformadores se utilizan para subir o bajar los niveles de tensión, dependiendo de si la electricidad se transporta a largas distancias o se distribuye a los usuarios finales. La clasificación de tensiones es un método para organizar las tensiones en función de su rango. Hay cuatro clasificaciones principales de niveles de tensión: baja (BT), media (MT), AT y extra AT (MAT). El aislamiento es un aspecto crucial de los sistemas de alta tensión, ya que evita que la corriente eléctrica se filtre y provoque cortocircuitos, daños en los equipos o incluso incendios. Según el nivel de tensión y la aplicación, se utilizan distintos tipos de aislamiento: aire, gas, aceite o materiales sólidos como plásticos y cerámicas.