Restauraciones coronorradiculares reforzadas con fibra

El diente pulposo representa un complejo órgano-mineral poroso capaz de preservarse dentro de la arcada dental a pesar de la ausencia de su pulpa. Las alteraciones biológicas, como la pérdida marginal de agua y la degradación gradual de las fibras de colágeno, afectan mínimamente a la integridad estructural del diente. Sin embargo, la pérdida de tejido dental que se produce durante las intervenciones terapéuticas se correlaciona directamente con una reducción de su resistencia, elevando así el riesgo de fractura y comprometiendo la viabilidad del diente a largo plazo. En consecuencia, es imperativo dentro de la gestión clínica adherirse a un gradiente terapéutico, dando prioridad a las intervenciones conservadoras siempre que sea factible.En los casos en que un diente pulposo exhibe integridad estructural comprometida con paredes mínimas restantes, la reconstrucción coronal-radicular se vuelve imperativa para mantener la estabilidad coronal y establecer un entorno libre de bacterias crucial para el éxito del tratamiento endodóntico sostenido y la prevención de la reinfección.Reconstrucción coronal-radicular adherida (RCRC).