Ontología analéptica

Luego del pol?ptico de La comunidad de los espectros, un nuevo comienzo se torna necesario. Un giro en el filosofar atento al espesor metaf?sico de la subversi?n epocal en curso en todo el orbe. Esa misma crisis revela ahora como insuficientes los m?todos m?s osados de las Humanidades del siglo XX. Un punto de partida: el relato acerca de un supuesto proceso judicial por vampirismo acaecido en un remoto cant?n de Hungr?a a principios del siglo XVIII. Con el discurrir de las hip?tesis aqu? propuestas, las relaciones con la licantrop?a se volver?n centrales y ambos fen?menos deber?n ser objeto de una minuciosa ultra-historia que acompa?a al lector hasta los tiempos paleol?ticos del culto de la Gran Madre.

Pero esto es s?lo el comienzo de un viaje metaf?sico que, bajo las formas de la sangre, el sacrificio y la metamorfosis, nos conduce hasta el origen mismo de la vida-muerte sobre la Tierra como estaci?n necesaria para una meditaci?n sobre el futuro cosmol?gico de los seres hablantes. El Vampiro y el Hombre lobo son las figuras filos?fico-conceptuales que, una vez desentra?adas, nos muestran la v?a regia hacia una forma completamente nueva de rehabilitaci?n del pensamiento especulativo bajo la forma de una "ontolog?a anal?ptica".

Desde los inmemoriales rituales del sacrificio antiguo, hasta la teolog?a pol?tica inversa del vampirismo, pasando por una in?dita filosof?a de los virus, se delinea ante nuestros ojos el subsuelo a partir del cual se revelan las condiciones de posibilidad de todo pensamiento acerca del Ser y la actual obsolescencia de todas las formas en las que este ?ltimo ha sido previamente mentado. De este modo, un tenebroso y enjundioso proceso judicial, hoy ca?do en el olvido, nos muestra que custodiaba, sin saberlo, los secretos supremos de todo lo existente que la inveterada tradici?n ha dignificado con el nombre de Cosmos. Se anuncia, as?, el comienzo de la Segunda Era Metaf?sica.