La relación entre el consumo de cigarrillos y los aspectos genéticos e inmunitarios

Fumar cigarrillos de forma habitual perjudica a casi todos los órganos del cuerpo, provoca muchas enfermedades y merma la salud general de la persona. Conlleva un riesgo significativo de muerte por cáncer, entre otros graves riesgos para la salud. Es responsable del 30% de todas las muertes por cáncer en los países desarrollados, porque el humo del tabaco contiene miles de sustancias químicas diferentes, muchas de ellas clasificadas como «cancerígenas para el ser humano». Así, los trabajos de muchos químicos y biólogos en los últimos 50 años han demostrado los efectos nocivos de muchos componentes del tabaco, un resultado probado fue la mutagénesis, es decir la capacidad de inducir mutaciones, el cáncer surge cuando las mutaciones se acumulan dentro del ADN porque algunas células actúan como proscritos. También como es sabido fumar cigarrillos se asocia con alteraciones de las defensas del organismo ya sea debilitamiento de los sistemas de defensa antioxidante o inutilización del sistema inmunológico. Muchos cambios son el resultado de la exposición a la influencia negativa de sustancias nocivas, que conducen a una alta producción de citoquinas como el factor de necrosis tumoral ¿ (TNF-¿), y se caracteriza por la expresión de un alto número de linfocitos.