La guerra y el humanismo

La primera guerra de Chechenia (1994-1996) fue una tragedia para el destino de decenas de miles de personas, y exterminó familias enteras. Confiando en su voluntad y sin perder la esperanza, Natalia fue a Chechenia, donde la guerra más feroz estaba en marcha, para encontrar a su hijo con la ayuda del guía checheno Aslan. Cuando conoció a su hijo, su madre no consiguió que se aboliera la pena de muerte para él. Luego se dirige al muftí checheno Akhmat Kadyrov, que nunca ha sido indiferente al destino de las personas que han sobrevivido al dolor y al horror de la guerra. Es Kadyrov quien, basándose en criterios sagrados, busca la liberación de un prisionero de guerra que ha sido condenado a muerte y lo entrega a su madre. Por lo tanto, la culminación del trabajo es un acto divino del Mufti para continuar con la familia. La esencia del carácter checheno se detalla en muchos capítulos del libro.