Du er ikke logget ind
Beskrivelse
CATORCE MESES LLEVABA Rafael en la estrecha celda. Ten a por mundo aquellas cuatro paredes de un triste blanco de hueso, cuyas grietas y desconchaduras se sab a de memoria; su sol era el alto ventanillo, cruzado por hierros; y del suelo de ocho pasos, apenas si era suya la mitad, por culpa de aquella cadena escandalosa y chillona, cuya argolla, incrust ndose en el tobillo, hab a llegado casi a amalgamarse con su carne. ...]