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"Nunca fui celoso. Nunca. Nunca pregunt? por parejas anteriores o futuras. Nunca me import? el historial ni las miradas furtivas. Siempre pens? que cuando mi pareja circunstancial no estaba conmigo era libre de hacer lo que quisiera. Siempre pens? lo mismo y tal vez por eso tard? en entender. Camin?bamos distra?dos por Corrientes, ri?ndonos de nada. Ella brillaba como siempre, envuelta en una remera de hilo y un pantal?n florido. Su risa era la mejor manera de salir de este mundo y dejarse llevar por sensaciones m?s placenteras, recorriendo lugares que s?lo cabr?an en una escenograf?a soleada. Cuando sonre?a le brillaban los ojos con la promesa de alg?n pensamiento inquieto; sus dientes blancos y peque?os, sus labios frescos brillando en un contraluz de alegre cursiler?a. Era la felicidad en cincuenta kilos y vestida de verano. Era la perfecci?n y era m?a.(...)"

Diecisiete relatos antol?gicos que combinan historias en las que se confunden la realidad y la fantas?a.