Implantación del Mantenimiento Productivo Total en la Industria Alimentaria

Para mejorar el estado operativo de una empresa, se requieren estrategias que tengan como objetivo eliminar el despilfarro, garantizar la calidad y reducir los costes. El enfoque del Mantenimiento Productivo Total (TPM) conduce al desarrollo de métodos y herramientas de gestión que promueven el cambio organizativo, especialmente a nivel de recursos humanos. La filosofía TPM apoya una cultura en la que el operador desarrolla un sentido de pertenencia hacia los equipos que maneja, conociéndolos mejor, asegura un clima de esfuerzos continuos hacia los objetivos de pertenencia, desarrollando habilidades y competencias, para estimular continuamente la mejora de la acción de los operadores. El desarrollo de uno de los pilares del TPM, el mantenimiento autónomo, está en el origen de estos cambios. En este caso, a través del sentido de pertenencia, se fomenta el interés de los operarios por su trabajo y rendimiento, proporcionando ventajas organizativas a todos los niveles. La implantación del TPM no sólo mejora la disponibilidad y la confianza en los equipos, sino que también proporciona avances y aumentos en la producción, en el desarrollo de la calidad de los productos y desarrolla una cultura de espíritu de equipo, a la vez que aumenta la capacidad de trabajo entre los individuos.