Estrellas Fugaces En El Cielo de Verano

Estrellas Fugaces en el Cielo de Verano El As alem n Erwin Maier condecorado tres veces con la cruz de hierro, fue derribado y tuvo que saltar en paraca das desde su caza Messerschmitt BF 109. Al ser capturado por las tropas sovi ticas pidi que le permitiesen ver al As ruso que le hab a derribado. Cuando se present ante l, L diya, una joven menuda con cara de ni a, pens que se estaban burlando. Richard Beckenbauer sufre un desafortunado accidente en el gran Prix de Berl n, su coche en llamas se estrella contra la tribuna donde se encuentran altos mandos militares y el mismo Adolf Hitler. Se le acusa de terrorista y le env an a un penal a la espera de juicio. Mal herido, con las piernas rotas, y con la escasa atenci n medica de un enfermero, comienza a ver la vida de otra manera, cada noche sue a que vuela sobre campos dorados de trigo y centeno. Al morir su hermano le ofrecen cumplir una misi n en Almer a - Espa a, si informa sobre los planes de los cabecillas revolucionarios, sindicalistas, anarquistas y comunistas, su expediente quedar en blanco, adem s le prometen poder regresar a las carreras.Tom s Garc a Hern ndez, dirigente anarquista, escritor, poeta y ante todo aviador, ser su mentor, el instructor que le ense ar a pilotar, a volar y ver la vida con otros ojos. El amor universal que no entiende de fronteras. El amor prohibido y clandestino entre dos j venes. La guerra interior primero y seguidamente la otra, la de Espa a. La lucha fratricida entre hermanos, demoliendo familias, convirtiendo a la persona despojada de arraigo en un implacable matador.La explotaci n, la miseria y el hambre, condiciones de trabajo infrahumanas en las minas que llevaban a la muerte a los trabajadores. Las huelgas revolucionarias de campesinos, jornaleros y mineros. El xodo de la poblaci n y la masacre en la carretera de M laga y m s tarde el bombardeo ordenado por Adolf Hitler sobre la ciudad de Almer a.Morir por el sue o de un mundo mejor, vislumbrado de soslayo en poemas de Lorca, Machado y Hern ndez, con la voz quebrada y el sonido de una guitarra. Los ideales de j venes pilotos que dan su vida por la libertad, estrellas fugaces en el cielo de verano.