Escuela y educación democráticas

La posibilidad de una escolarización y educación democráticas se asume como una asignatura pendiente en el contexto mozambiqueño y un reto actual en la medida en que la democracia capitaliza la vivencia de experiencias democráticas en el proceso educativo y, en consecuencia, la escuela se convierte en un verdadero vector de democracia. Dado que la consolidación de la democracia y de la ciudadanía democrática pasa inevitablemente por la educación y la formación democráticas, el gran desafío para el Estado mozambiqueño es que dé prioridad y urgencia a la necesidad de invertir en la escuela como agencia de formación democrática, es decir, asumirla como factor generador de competencias y habilidades democráticas, como el diálogo, la libertad de expresión, la participación, la tolerancia, la solidaridad, la cooperación, el respeto a las diferencias, etc. También es esencial vincular la práctica didáctica y pedagógica con la puesta en marcha de canales de democratización de las relaciones intra y extraescolares.