El Poder del Sacrificio

Los sacrificios son poderosos, muy poderosos El hombre m s rico, el m s fuerte, los hombres y mujeres m s bendecidos, el m s sabio, el rey m s grande, los profetas m s poderosos fueron hombres y mujeres de sacrificio. Lo dieron todo, arriesgaron todo por su gente, por la humanidad y por Dios para lograr sus metas y proezas de las que incluso se enorgullece la eternidad. Quiere conocer sus secretos? Pues bien, si quiere ser grande, primero debe convertirse en un hombre o una mujer de sacrificio. Para aquellos que pueden pagar el precio, todo es posible. Los cap tulos El poder del sacrificio, S lo sacrifica lo tuyo, Mi paso por Egipto, Pago el precio, S ganme , Venimos por ustedes, Te protejo, Prepara la ltima cena, El poder de salvar, La alabanza, La oraci n y El ayuno, ser n sumamente reveladores. En la Biblia no s lo se habla de los grandes sacrificios de extraordinarios hombres y mujeres y c mo sus acciones los hicieron grandes, sino tambi n de personas como Yonatan 'Yoni' Netanyahu, el joven israel que dirigi la unidad de comando para rescatar a los rehenes jud os que se encontraban en el avi n que fuera secuestrado y desviado al aeropuerto de Entebbe, Uganda en 1976. Tambi n vimos a algunos h roes militares, especialmente los de Operaciones Especiales, como los SEAL y la Fuerza Delta. Estos hombres dan lo mejor de s ; constantemente arriesgan todo, incluso su vida, para defender a su gente y a la humanidad. Sacrifican su vida para proteger a otros. Jes s dijo que el sacrificio m s grande es que un hombre d su vida por los dem s. Nuestros respetos Ellos nos ense an lo que debe ser el sacrificio. Jes s dijo qu sacrificio puede ser mayor que el de un hombre que da su vida por sus amigos? Alabamos su coraje y patriotismo extremo. Aqu aprenderemos sobre los sacrificios de fe, amabilidad, patriotismo, oraci n, ayuno y alabanza. Cuando se traspasa de lo ordinario en cualquiera de los anteriores, de inmediato act a sobre fuerzas divinas, invisibles y sobrenaturales que responder n y llegar n en avalancha.