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Beskrivelse
Emigrar a Londres con una mano delante y otra detr s, y regresar, despu s de unos cuantos a os, con las manos llenas, no era algo que le ocurriera a todo el mundo. Tampoco fue casual que las manos se liberaran, al mismo tiempo, para soltar los fantasmas que pululaban por la mente de nuestro emigrante. Esas manos, por supuesto, tapaban partes de su cuerpo a donde no hab a llegado nunca nadie de aquella manera. Las cosas se le complicaron cuando decidi regresar a Londres, despu s de muchos a os de haberse instalado de nuevo en Espa a. Le ocurri lo que ni en sus sue os m s extravagantes hubiera podido imaginar.