De la suplantación al expolio

El Camino de Santiago, los oscuros or genes de la parafernalia de las peregrinaciones a Compostela, la suplantaci n del Ap stol, el tesoro de Caldas de Reis... entretejen las vivencias de personajes que nada tienen en com n pero que se ven involucrados en dram ticas situaciones que alteran su destino.La nostalgia de los a os de universidad que ya no volver n, el ambiente entra able de tabernas que asisten a su sutil ocaso engullidas por la globalizaci n que todo lo uniformiza, son los escenarios por los que se deslizan los aconteceres de los protagonistas de esta historia.La solapada amenaza de un terrorismo atroz y sin sentido, con un desenlace brutal y despiadado, subyace en la narraci n, y atrapa a unos seres que son arrastrados a asistir y participar impotentes en ese siniestro mundo.La aparici n fortuita de documentaci n de extraordinaria importancia permite desvelar y comprender pasajes de la historia de Galicia y de Espa a en los momentos en los que se estaba forjando su vertebraci n como naci n evidenciando la decisiva actuaci n de la Iglesia que, desde la Abad a de Cluny, manejaba entre bastidores los hilos de la pol tica organizando alianzas e imponiendo en los reinos de Portugal, Galicia, Castilla y Arag n a reyes vinculados con la casa de Borgo a, es decir, con la Abad a. Personajes como la reina Da Urraca, el arzobispo Diego Gelm rez, el papa Calixto II, cu ado de Da Urraca, entrelazan sus vidas en aquellos a os convulsos del nacimiento de la naci n espa ola. Esta documentaci n, cinco siglos despu s de haber sido escrita, incide en el desenlace de los acontecimientos que marcan la vida de los actores de la novela.Dos noticias sin conexi n entre s , aparecen el mismo d a en la primera p gina del peri dico de m s tirada de Espa a: el descubrimiento del bos n de Higgs y la recuperaci n del C dice Calixtino, robado de la catedral de Santiago un a o antes. Ambas noticias, est n directamente relacionadas con el desenlace de la narraci n C mo?