Du er ikke logget ind
Beskrivelse
La inminente entrada en vigencia de la Ley 1952 de 2019,prevista para mediados del año 2021, ha incrementado las discusiones en lacomunidad jurídica del derecho disciplinario. He seguido muy de cerca la construcción del eufemísticamentellamado Código General Disciplinario, del cual he opinado con independencia ycon toda libertad crítica, dejando sentados mis criterios en un primer libroque lleva el mismo nombre del presente, sin que los mismos hayan sidoconsiderados en lo más mínimo, pues todo indica que quién lideró el nuevoCódigo no quisiera saber nada de lo que concierne a estas letras.Es mi constancia histórica de algo que se construyó como unacortina de humo para paliar unas críticas hoy reveladas como ciertas por lasentencia de julio 8 de 2020 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos,con la cual se demostró que había alternativas de concebir el derechodisciplinario y no camisas de fuerza que conllevaron a un particularísimointérprete a actuar como "instrumento mediático" de un hombre deatrás o, mejor, de un código de atrás.