Cuentas pendientes

Cuentas pendientes, m?s all? de lo evidente que puede ser su pertenencia a la actualizaci?n de las novelas epistolares, nos hace caer en la introspecci?n donde, en el abismo de los personajes, se nos revelan los efectos de los fanatismos religiosos, personales y econ?micos; esos efectos que nos llevan a alejarnos de nosotros mismos y nos quitan la posibilidad de ser felices. El poder de la novela se encuentra en lo que dec?a Ernest Hemingway en la segunda historia del iceberg. La historia de amor o desamor de Manuel Salvatierra y Ra?l Ayala, en todos sus contornos, le sirve a Rend?n de pretexto para elaborar una catarsis de aquello en lo que pueden convertirse las obsesiones en el amor. Lo que resulta de convertirse en una sombra por el otro, nuestra propia ausencia. Contada en cartas, en una novela dentro de la novela y a trav?s de links de canciones, Cuentas pendientes no pretende, pero es un canto a la valent?a de regresar "hacia adentro" y tomar la decisi?n de ser quien realmente queremos ser. - Esmeralda Nava