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Beskrivelse
'La politica criminal es concrecion, en el ambito de la lucha contra el delito, de los principios generales a los que responde la politica toutcourt. Y cuando, como es el caso, la desregulacion es uno de los principios sobre los que pivota la globalizacion, economica y politica, el sistema penal tendera a reducir sus espacios de intervencion punitiva. Alli donde, en aplicacion de las propuestas neoliberales que llevaron a la crisis economica mundial de 2008, no se regula la economia licita, tampoco se regula la ilicita, y crecen los ambitos de impunidad y connivencia ('Derecho penal del amigo') con la criminalidad socioeconomica funcional a los requerimientos de la lex mercatoria: paraisos y amnistias fiscales, gran corrupcion politica, indultos, procedimientos inidoneos por obsoletos, figuras delictivas puramente simbolicas, etc. Simultaneamente, se retoma el argumentario contrainsurgente, urdido como respuesta mundial a los atentados a las Torres Gemelas (Nueva York, 2001), que conforma la base ideologica del 'Derecho penal del enemigo', para aplicarlo a la lucha contra las pequenas infracciones (delitos de bagatela, top-manta, irregularidades administrativas), atribuidas a los colectivos no funcionales a los mercados: los indigentes excluidos, paradigmaticamente representados por el inmigrante irregular. La politica criminal de nuestros dias no es, asi, unidireccional, sino bifronte, janica. Como Jano, el dios de las dos caras, se proyecta en dos direcciones, solo aparentemente contrapuestas: la una, plutofilica, de connivencia con el poderoso, que manifiesta su poder tanto en la produccion como en la aplicacion de la ley; la otra, aporofobica, de rigor punitivo frente al pobre; ese que, en nuestras sociedades presididas por el principio del intercambio, aporta muy poco y que, en consecuencia, no puede esperar nada.'